Mandingo se fue a los karts
La verdad es que es una experiencia, que esos chismes corren más de lo que aparentan, y que está muy bien. Caro, pues lo de siempre, un poco (las 3 carreras nos costaron 36€, teniendo en cuenta que teníamos un bono 3x2). El resultado, pues nada, los dos que no habíamos conducido un kart en la vida quedamos últimos a escasa diferencia. Todos acabamos con agujetas, y yo me lo pasé como un enano. Impresiona el sonido que hace ese chisme cuando derrapa ese chirriar de goma mientras el muro se acerca. Para repetir dentro de un tiempecillo. Ahora nos queda ir a echar un paintball. A ver si encontramos uno cerca del trabajo, y conseguimos que se apunten los jefes, que eso de disparar al jefe siempre tiene otra gracia...
1 comentario:
Hola! qué envidia! quién no ve las carreras de F1 (desde que está Alonso porque parece que antes no existían) y quiere montarse en un monoplaza?... seguro que antes casi nadie iba a karts...bueno y ahora tampoco porque qué caros! Se te ha olvidado poner si ganaste la carrera! jajaja.
Saludos!
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