Mandingo Vs El museo de la ciencia

Hoy martes, mi padre ha propuesto que hiciéramos una visita al museo de la ciencia de Valladolid, que para eso pilla cerca de casa, y además el martes "sólo" vale 5€. Así que nos hemos encaminado para allá mi padre, mi hermano y un servidor, dispuestos a ver que nos ofrece el susodicho museo. Pues tras pagar nuestra entrada, nos encontramos con que tenemos 3 exposiciones itinerantes, la permanente y el planetario. La primera de las itinerantes se llama los sonidos del universo o algo así, y es una sala llena de sofás y de auriculares para oir diferentes sonidos tan interesantes como el ruido de un púlsar o la berrea. Intrascendente.
Después fuimos al planetario (a las 17.15 creo que es el único pase) esperando ver una película que tratara de cosas de planetas y tal, y nos encontramos con un documental que duraba casi 40 minutos acerca de la atmósfera... sólo diré que me dormí un rato...
La tarde empezaba a decaer, así que volamos a través de las dos exposiciones itinerantes (una de energía y la otra de física médica) para encaminarnos a la permanente, esperando que nos ofreciera algo que no nos dejara la sensación de haber perdido la tarde entera.
La exposición permanente se inicia con dos salas, una dedicada a Gas Natural y otra dedicada a Aguas de Valladolid... esto, ¿estás diciendo que es publicidad, autobombo y platillo?.... no majo, la publicidad es gratis, para ver esta hay que pagar al menos 5€ ^^. Te hablan que si el agua por aquí que cómo se forma el Gas Natural (como si no hubiese más combustibles... claro, que Cepsa no pagó una sala...). En fin, una vez vistas estas salas, donde al menos hay algunas cosillas para poder juguetear, se pasa a la sala de la neurona, que ójala nunca hubiera visto, porque me dió bastante pena, a la del cerebro, que no hace que la visita mejore, y a una de mapas, donde lo mejor es que me encontré trabajando a un amigo del Centro Cultural, que muy amablemente me explicó las cosas más interesantes deprisa y corriendo. 5€ desperdiciados... sin ninguna duda.
La verdad es que si no mejora el museo, no me extraña que no tenga éxito... sinceramente, quizá si tuviera 7 años, las salas del cerebro me habrían podido interesar...